Siempre hay dos lados con una moneda

Las cosas comenzaron tranquilizarse en mi vida, pero no por mucho tiempo, porque el domingo tenía una experiencia desafiante con la policía peruana. Lleno de alegría y felicidad estaba viajando con Ivan (mi pareja) para visitar amigos, cuando nos paró la policía queriendo ver nuestros documentos del auto. Tomando su trabajo muy serio, se dieron cuenta que mi inspección del auto ya había sobrepasado por dos semanas.

Tengo que admitir, que estaba alerta de esto, pero por diferentes razones había postergado el viaje necesario a la caótica y ruidosa ciudad de Cusco constantemente. Por fin había decidido hacer una cita para el miércoles en la tarde, pero ya hubiera sido demasiado tarde, tomando en cuenta la situación en la cual estábamos ahora.

Quisiera mencionar que me sangre alemana definitivamente está expresada en ser una persona honesta y responsable, no jugando con asuntos oficiales. Pero aquí estábamos, enfrentándonos con la policía que nos hablaron muy feos.

Intentando salvar la situación, Ivan intentó todo lo posible para explicar la situación y para poder encontrar una solución, pero nos encontramos en Perú, otro país muy corrupto en Sud América, similar a Bolivia.

Para dejarnos “ir”, pidieron un pago de 1000 Soles (300 Dólares!!!!) directamente a su bolsillo. Desafortunadamente, pagando a la policía en la carretera es una costumbre común por aquí, si quieres evitar dificultades oficiales.

Obviamente no queriendo pagar este increíble monto, decidimos ser llevados a la comisaría para tomar el camino oficial y correcto. – El resultado de nuestra sinceridad: una multa de 2000 Soles (600 Dólares!!!!). Además detuvieron nuestro auto hasta pagar la multa. Cada día el carro se quedaría en la comisaría con un costo de 6 Dólares diariamente.

Entonces, que lesión aprendí aparte de ya no tomar riesgos, sabiendo que soy una “gringa” en un país extraño y corrupto.

Aprendí no otra vez ignorar los muchos llamados de mi intuición para ir a Cusco.

Aparte de eso, cada una cosa (en nuestro mundo dual) tiene dos lados. Si, hubiera podido pagar los 1000 Soles en la carretera, pero así hubiera apoyado algo con que por NADA estoy de acuerdo – la corrupción.

Y, hay una lesión aún más grande en el incidente: Todo depende de nuestra percepción. Obviamente, estaba enojada, decepcionada, triste etc., pero cuando me calmé un poco, escuché una voz diciéndome: “Que pasaría si este incidente te hubiera prevenido de algo mucho peor y mucho más grave?” Conozco bien esta voz. <3 Escuchándolo, confiándolo me trajo paz y quietud interna. Volví a sentirme centrada. Nunca sabré que habría pasado si la policía no nos hubiera parado. Pero yo sé, que la manera de ver el incidente cambió mi bienestar. Y eso es muy muy importante.

Es cierto que hay momentos cuando no es fácil tomar un punto de vista de esta manera, pero primero, no pude cambiar la situación, y segundo tengo fe y confianza completa en que el universo está apoyando y protegiéndonos.